Lemuria, fue donde se concretò la vida la raza humana tal y como la conocemos hoy, en este trabajo y tarea tuvieron que ver varias razas de diferentes lugares, entre ellas destaca la Pleyadiana.
Muchos de los que alli habitaron son las llamadas “semillas estelares” , ya habiendo transitado otros planetas y civilizaciones, fueron sensibles al llamado de Gaia, para venir a cumplir un propòsito en esta Tierra.
Muchos otros, eligieron encarnar por primera vez en este planeta de experimentaciòn, tambien cada cuàl en un propòsito especifico.
En Lemuria teniamos el recuerdo intacto de quienes eramos, de donde proveniamos, nuestro propòsito, misiòn ,etc.
Podiamos ver a simple vista no solo en nosotros si no tambien en los demàs, todo esto, su esencia misma, su configuraciòn, su cuerpo de Luz y toda su historia.
Eran comunes la telepatìa, la teletransportaciòn, la telekinesis, etc.
La conexiòn con los reinos era lùcida y profunda, con el reino vegetal , mineral y animal, en profundo respeto y hermandad, ya que tambièn eramos capaces de ver a simple vista su origen y propòsito.
Asì como la profunda colaboraciòn y aprendizaje mutuo con los elementales de la naturaleza, los Elfos (muy presentes) y demàs seres màgicos, hoy presentes en el planeta no de manera fìsica.
Se vivìa en Conciencia de 5ªDimensiòn, eligiendo tener un cuerpo fìsico para poder experimentar desde el.
El trabajo con los elementos era cotidiano, en plena Conciencia de cada elemento como el Espìritu mismo de la Madre Tierra.
A travès de Lemuria se crearon los Registros Akàshicos Femeninos de la Humanidad y a travès de Atlàntida , los Masculinos. Por esto estos dos grandes y antiguos continentes son los padres de la Humanidad.
Muchas cosas acontecieron, que hicieron caer a estas 2 potencias, y en esta caìda se abriò un largo camino de aprendizaje, maravilloso, donde descendimos profundamente hasta llegar a la noche mas oscura y a las sombras mas subterraneas, a nivel individual y a nivel colectivo.
Ahora es tiempo de integrar la oscuridad, abrazandola en Luz.
Pues todo ciclo vuelve al mismo lugar desde donde empezò, pero desde otro lugar mas elevado de Conciencia.
Hoy nos toca luego de tanto y tanto andar, regresar a ese estado Puro, hoy ya maduros, ya experimentados.
Por eso resurge con tanta fuerza y pulsa desde el corazòn como un llamado claro a reagruparse para recordar nuevamente quienes somos.
Para retomar la tarea, el pròposito y la misiòn, que no es mas que manifestar quien Eres.
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Leticia Breijo
